«Llegará el día en que termine esta horrible guerra y volveremos a ser personas como los demás, y no solamente judíos» – Anna Frank

La Filmoteca de Catalunya, dentro del programa dedicado al cineasta norteamericano Sidney Lumet, nos ofreció el drama «The Pawnbroker».

Cuenta la historia de Sol Nazerman, un hombre ya maduro de clase media que vive en Estados Unidos aparentemente solo y con unos vecinos solidarios con su aislamiento interno.

The Pawnbroker

Nazerman es un hombre gris, triste, aparentemente vacío e infeliz, todo tiene una razón de ser, es un tipo marcado por un pasado dramático que se desvela con el paso de los minutos a través de flashbacks puntuales.

Ahora regenta una tienda de préstamos en Harlem y ha publicado un anuncio pidiendo ayudante. En estas se presenta Jesús Ortiz, un puertorriqueño con ganas de aprender del oficio. Nazerman se limita a enseñarle como funciona la tienda, a distinguir el oro a través de los reactivos o de como negociar con los clientes. Cuando Ortiz trata de conectar personalmente con Nazerman, este se pone a la defensiva y no sale de sus casillas, Ortiz no sabe que le pasa, pero intuye que lleva una gran mochila en su espalda.

Ortiz tiene amistad con los gánsteres del barrio, que tratan, al saber de su nuevo puesto, de traer material robado a la tienda para que se lo compre Nazerman. Este de una primera cortadora de césped impoluta, casi seguro sustraída, no se niega por Ortiz de adquirirla, pero no quiere que vuelvan por allí.

Se ven cosas raras en la tienda, llamadas de un tal Rodríguez, poderoso mafioso y otros que envía a cambiar a Nazerman cheques por el mismo valor que sobres en efectivo, es decir un claro lavado de dinero proveniente del dueño del club donde trabaja sin mas la novia de Ortiz.

Ortiz toma este trabajo con el prestamista pues planifica una vida con si chica, pero para llevarla a cabo tiene claro que ambos deben de ahorrar algo de dinero. Sus amigos gánster tratan de darle a entender que ser ayudante del tendero es ser un pringado, que no le llevará a poder cumplir sus sueños, pero este se niega a entrar en mundos oscuros por dinero fácil.

El trato de Nazerman con los que llegan a la tienda a empeñar objetos es horrible, a todos les ofrece entre uno y dos dólares por pieza y no tiene un solo gesto de amabilidad, ni una sola sonrisa. Tampoco tiene humanidad ni piedad por los que les piden algo mas por sus pertenencias. En especial es el caso de un hombre mayor negro, cliente habitual, que Nazerman rechaza hablar con él insistentemente mientras que lo único que quiere es un poco de conversación.

The Representation of Trauma and Memory in The Pawnbroker (Sidney Lumet,  1965) – Offscreen

Ortiz comenta este caso del hombre mayor con Nazerman para saber si también es racista, este enfadado dice que no lo es, que todas las razas son iguales, que solo ha perdido su fe en Dios, su confianza en la humanidad y toda capacidad de empatía, en lo único que cree es en el dinero (recordando indirectamente a Greed (1925) de Erich von Stroheim)

Lo mismo ocurre con Marilyn Birchfield, una trabajadora social del barrio que pide dinero a Nazerman para un proyecto de patrocinio al equipo infantil de futbol local. Él primero se niega, pero finalmente cede extendiéndole un cheque.

The Pawnbroker

Ella días mas tarde se acerca de nuevo a la tienda y le pide perdón por las formas y que quiere tener un acercamiento mas personal con él. Tal es que lo invita a hacer un picnic en un parque cercano. Llega ese momento, el se olvida por completo pero ella lo encuentra en un banco de la calle, tratando de conectar, él la rechaza por completo y cierra toda posible relación.

La única conexión con el mundo la tiene con la esposa de quién fuera compañero en los campos, un tipo que murió en los mismos. La relación queda empañada por el padre postrado de esta que no cesa en decir que no se respeta la memoria de quien fuera su amigo si este se encama día si y día también con la mujer de él. Nazerman, y la propia mujer, acumulan un gran odio hacia esa figura paterna. Un padre que le reprocha a Nazerman de forma literal: “Yo también estuve en Auschwitz, pero salí vivo. Tu saliste muerto”,  “Un superviviente cobarde, ¿merece la pena? Sin amor, sin compasión ni piedad. ¡Sol Nazerman, sólo eres un cadáver que se mantiene en pie!”.

Rod Steiger is 'The Pawnbroker' on Criterion Collection and Kanopy – Stream  On Demand

Tras un nuevo rechazo de Ortiz por parte de su jefe, por venganza, decide hablar con los gánsteres y organizar una especie de atraco, pero él establecerá las formas, el día y la hora que debe producirse.

Tras varios flashbacks de su vida pasada, descubrimos que Nazerman y su familia, fueron victimas del holocausto siendo enviados a un campo de concentración, donde vio morir a sus dos hijos y esposa, que también fue violada por oficiales nazis. También vemos su agobio cuando viaja en metro y lo compara en su mente con el triste viaje en los trenes alemanes hasta el campo.

The Pawnbroker (1964), 42% OFF | www.afaqcm.com

Nazerman decide ir hasta casa de Marilyn Birchfield y contarle de su vida, una vida en la que ha perdido todo y que la soledad y las cicatrices muy mal curadas han mermado su mal carácter y su pésima forma de ser.

Nazerman conecta este último hecho con la explotación sexual que se practica en el local cercano y decide negarse a seguir participando en el lavado de dinero, lo que resulta en un enfrentamiento con Rodriguez, que le acaba amenazando de muerte.

The Pawnbroker (1964), dir. Sidney Lumet: The Cost of Memory – musings on  films

Parece que al final empieza a no darle ninguna importancia al dinero y da mas de lo que racaneaba a los clientes y vende los artículos mucho mas baratos, parece que se ha liberado de su misantropía y se está volviendo mas persona. Pero esto no le impide de un nuevo desprecio hacia Ortiz que se materializará en un robo frustrado de la pandilla, planificado por este, que acaba por herir de bala y la muerte del mismo ayudante. Nazerman enloquece y se atraviesa la mano con la varilla metálica en que se clavan los recibos y vaga por las calles ensangrentado.

A destacar la calidad argumental, la forma de organizar una serie de ideas para plasmarlas en un presente poco prolífico centrado en tratar de olvidar la crudeza de una vida pasada.

El prestamista - Socio Espectacular

A nivel técnico destacar la manera de grabar planos generales, primeros planos y un Harlem de los años sesenta con todo su esplendor y miserias intrínsecas, esplendor por lo cultural (como lo es la banda sonora de Quincy Jones que acompaña a la cinta o los carteles de grandes eventos como conciertos de Herbie Mann en grandes luminosos) y pobreza por las gentes que circulan mendigando en la venta de sus pocas cosas materiales.

«The Pawnbroker» fue la primera película estadounidense en tratar el Holocausto desde el punto de vista de un superviviente. Añadir que fue también una de las primeras películas hechas en Estados Unidos en mostrar escenas de desnudo durante la vigencia del Código Hays; y concretamente la primera que obtuvo la aprobación del Código pese a aparecer en ella pechos femeninos desnudos.

Escrito por Rodolfo Monserrat